sábado, 23 de mayo de 2020
Capítulo 20
Zack se queda desnudo ante su marido. Siente vergüenza, agacha la cabeza. Con sus manos se cubre los genitales. Gato sonríe. Le acaricia el pecho. Lo besa en los labios. La parte más sensible de Zack empieza a creer aunque tampoco es muy grande. Zack se ruboriza. Gato, aunque no siente ningún tipo de deseo sexual hacia su marido, sí quiere que éste goce de él, que deje de verlo como una fantasía, como algo que no puede tener y que empiece a verlo como algo normal. Le agarra de las manos para que no se cubre pese a que encuentra resistencia.
--soy tu marido... conmigo no tienes que tener miedo...
Zack se deja llevar pero no se atreve a mirar a su marido. Gato se toca el cuerpo con las manos de Zack este jadea. Luego Gato se aparta de él. Zack gime mientras se va desnudando, abre los ojos como platos ante la hermosura del bello cuerpo escultural de Gato totalmente desnudo. Siempre había deseado verlo así.
--cierra la boca que te van a entrar moscas --pregunta Gato divertido.
--nunca nada igual... eres tan bello,tan... tan...
Zack habla jadeante. Está impresionado. Nunca pensó que tendría ante sus ojos esa posibilidad. Gato sonríe con cariño. Por un lado le emociona la devoción de Zack hacia el aunque por otro lado le incomodo que lo idolatre de esa manera y sobretodo le hace sentir culpable. Zack se rompe de placer cuando el desnudo Gato lo acaricia. Gato lo nota muy tenso:
--no pienses en nada... sólo siente y disfruta --dice Gato mientras va empujando a Zack hacia la cama.
Luego Gato se une a él. Zack nunca pensó que sintiera tanto placer, sentir el cuerpo de Gato rozando al suyo lo hacen gritan, estremecerse. Por un momento Gato siente que su marido no va a soportar tanto placer porque en realidad la sesión sexual ni ha comenzado. Zack gime, jadea, se retuerce mientras el cuerpo de Gato se acopla al suyo. Siente un taladro que se le va introduciendo en el cuerpo, es una sensación muy placentera aunque dolorosa, un dolor que le gusta. Llora y goza mientras se funde con el cuerpo del hombre al que ha amado durante casi toda su vida, Siente que va a morir de felicidad. Zack queda exhausto, tumbado al lado de Gato. Verlo desnudo, saber que ha hecho el amor con él es algo tan grande que no sabe que sentir, qué decir. Gato a su lado lo mira con afecto. Le hace gracia la manera en la que Zack lo mira, está en shock. Gato apoya la cabeza de su esposo sobre su pecho. Zack tiene deseos de gritar de felicidad. No dice nada. Gato le dice muy fraternalmente:
--no te has muerto no? ha sido algo normal...
Zack mira a Gato boquiabierto:
--¿normal? ¡¡hemos hecho el amor...¡ ¡¡ha sido tan hermoso... Nunca pensé que se podría ser tan feliz... Nunca pensé que estaría aquí contigo, que sería tuyo... ¡¡que tú serías mío...¡
El rostro de Zack se llena de lágrimas. Gato pensó que al alcanzarlo dejaría de verlo como un Díos, como una estrella. Ha sido suyo pero Zack no lo sabe asimilar. Gato conmovido seca las lágrimas de su esposo suavemente con sus manos. Le da un ligero beso bajo los ojos:
--cuando me conozcas más ya verás que no tenías razón para endiosarme tanto.
Zack lo mira. Lo acaricia casi con miedo:
--tengo miedo de que esto no sea real, de que tú desaparezcas...
Gato le besa la mano. Lo mira con cariño:
--soy real, soy tu marido... Nos hemos acostado juntos. Es una realidad que tienes que asumir porque sino no podremos llevar una vida de pareja...
Marido, acostado juntos, vida en pareja. Son cosas que Zack nunca pensó que haría con Gato:
--es que ni en mi imaginación pense alcanzar tanto.
--Pues ya vez que soy alguien como tu, alguien que podías tener sin problemas...
--vcomo yo no... Tú eres mi vida...
--No digas eso...
--es que te amo tanto...
Gato lo acaricia con ternura, se traga su culpa:
--espero que nunca debas arrepentirme de haberme amado...
Zack abre los ojos como platos:
--¿¡¡estás loco?¡ ¿¿¡como me voy a arrepentir de amarte? en todo caso eres tú el que te tienes que arrepentir de casarme contigo...Ya ves... soy muy poca cosa... Mi cuerpo no es como el tuyo...
Zack siente vergüenza. Se siente inferior a Gato porque este tiene un buen cuerpo y Zack no. Gato lo acaricia con ternura:
--el cuerpo tiene arreglo... Si me ves bien no somos tan diferente...
--Eres tan llamativo... tan explosivo... --dice Zack excitado.
Gato le sonríe:
--eso es porque no llevas los lentes y no me ves bien...
Con timidez Zack le dice:
--sí menos mal que no te veo bien... No podría soportar tanta alegría...
Gato estruja a Zack con cariño:
--gracias por quererme tanto...
Gato tiene a Zack muy abrazado, Zack está encima suyo:
--me muero por besarte.
Gato quiere ser cariñoso con Zack. Aunque tampoco se tiene que esforzar mucho porque le está muy agradecido.
--Soy tu marido... Me puedes besar siempre que quieras.
Zack le acaricia el rostro con las manos incrédulo. Ríe. Gato sonríe también sorprendido:
--¿¿qué te pasa?
Acariciándole los labios Zack le dice:
--es que es tan grande que estemos los dos aquí, en esta cama testigo de mi soledad y de este amor que yo creía que se iba a morir conmigo...
Gato le sonríe y lo besa con compasión y agradecimiento. Zack se estremece, aún no se acostumbra al estar en brazos del hombre de sus sueños, del gran amor de su vida.
--Tengo ganas de hacer algo...
Acariciándolo con ternura, Gato le dice
--puedes hacer lo que quieras...
Zack no lo duda. Se pone en pie sobre la cama y empieza a saltar.
--¿qué haces, loco? --pregunta Gato divertido.
Zack no hace más que saltar:
--¡¡soy la persona más feliz del mundo...¡
Extiende sus brazos como aquella película, Titanic:
--que digo del mundo ¡¡del universo...¡ ¡Tú eres mi Díos y a tu lado me siento el rey del mundo..¡
Va gritando y saltando Zack ante la mira sorprendida, emocionada y divertida de Gato.
--¡¡te vas a matar¡ --dice Gato divertido.
Zack cada vez salta más y más:
--no me importa porque moriría feliz, hoy es el día más feliz de mi vida y no me importaría morir...
Zack cae en ese momento en brazos de Gato. Lo golpea. Gato emite un quejido pero se ríe:
--lo ves? te podías haber hecho más daño...
Zack mira a Gato ensimismado:
--yo a tu lado sé que jamás me pasará nada malo.
Gato se entristece. La culpa lo domina. Zack lo besa:
--gracias por haberme regalado lo más maravilloso del mundo... tu amor...
Gato no es capaz de decir nada. La culpa lo domina. Zack se tumba al lado de su esposo:
--me muero de sueño... --le dice Zack aferrándose a él.
Gato le acaricia:
--pues duermete..
Zack se queda dormido en brazos de su esposo. Gato siente que se saca un peso de encima. Sale de la cama con cuidado. Se pone el boxer. Mira a su marido con culpa:
--perdoname... perdoname...
Zack duerme placidamente, Gato siente remordimiento. Lo ve tan inocente, tan enamorado que le duele mucho estar lastimandolo. Mira hacia la ventana. Piensa en Cayetano, en Demetrio:
--¡pero me la tienen que pagar...¡ --doce con rabia.
Luego mira a Zack con dolor.
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